Te estoy dando lo peor de mí. Las sobras.

El momento que ya no espero.

El espacio más alejado.

Te entrego lo que no quiero…

Tú, sin embargo,

Me ofreces todo.

Las fuerzas que no tengo.

La vida que me falta.

El aliento que no merezco.

La esperanza que ya no me queda…

Me creo que estoy viviendo en la luz pero sólo veo sombras. ¿Cómo voy a distinguirlo si sigo ciego?, ¿qué voy a decir si mi boca sólo parlotea y mis oídos no quieren escuchar?

Y sigues ahí. Permaneces,

Con gritos rotos que me susurran: ¡Aquí estoy! [#Isaías 65:1]

Abriendo un camino nuevo en mi desierto [#Isaías 43:19]

Con manos entregadas y brazos abiertos [#Isaías 49:16]

El descarriado era yo, pero la condena te la llevaste tú [#Isaías 53]

Estaba perdido, hasta que saliste a mi encuentro…

Hoy es un buen momento para pedirle:

Despierta mi oído, limpia mi boca e ilumina mis ojos. Gracias. Otra vez. Porque

Has sido, Eres, y Serás.

Has estado, Estás y Estarás.

Que así sea.

 

Gozo y Paz,